Darfur: el Fiscal de la CPI sostiene que continúa genocidio
El Fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI) acusó a las autoridades de Sudán de proteger deliberadamente a quienes están cometiendo genocidio en Darfur.
Luis Moreno Ocampo dijo al Consejo de Seguridad de la ONU que el presidente Omar Al-Bashir y sus seguidores están haciendo enormes esfuerzos para encubrir los crímenes.
“Cientos de civiles fueron asesinados en los últimos 6 meses, miles fueron desplazados por la fuerza, y más de 2,5 millones sufren una forma sutil de genocidio”, declaró Moreno Ocampo.
Agregó que Al-Bashir fue quien dictó las órdenes criminales de atacar a los civiles y destruir sus comunidades y no tiene voluntad de investigar a quienes siguen esas órdenes.
La situación en Darfur no es sólo una crisis humanitaria, añadió el fiscal, es un ataque sistemático a la población civil.
Ell conflicto se remonta al año 2003, cuando aumentan las tensiones entre las dos poblaciones que conviven en la zona; por un lado la población negra; y por otro lado la de origen árabe. Ambas comparten que son mayoritariamente musulmanas. Los conflictos recientes son los residuos de los que tuvieron lugar en la década de los años 80, cuando se producen enfrentamientos entre ambas por la escaseza de recursos. Además, la llegada al poder en el año 1989 de un gobierno militar de corte islamista,establece medidas que favorecen más a los grupos étnicos árabes que a los agricultores negros.
Así, en el año 2003 dos grupos africanos rebeldes: el Movimiento Justicia e Igualdad (JEM) y el Ejército de Liberación de Sudán (SLA), alegando la opresión que sufren, atacan las comisarías. Como respuesta, el gobierno recurre a la fuerza aérea y a los conocidos como " demonios a caballo", que se encargan de arrasar con los campos de cultivo de la población negra, matan a los hombres, violan a las mujeres, queman sus vidas...
Se producen desde entonces continuadas violaciones de los derechos humanos, asesinatos, la mayoría de la población debe de huir a los campos de refugiados situados en la zona, para huir del infierno en le que viven.
Según las cifras de las Naciones Unidas más de 300.000 personas han muerto en Darfur como resultado de enfrentamientos, enfermedades y hambrunas a lo largo de los últimos seis años y al menos, 2,7 millones de personas han sido forzadas a abandonar sus hogares.
Resulta curioso que en el año 2008, el fiscal de la Corte Penal Internacional, presenta cargos contra el presidente Omar al-Bashir por crímenes de guerra, de lesa humanidad, así como cargos por genocidio. La sentencia llega en marzo de 2009. El Gobierno de Jartum responde entonces con la expulsión efectiva de las trece ONGs, a las que acusa de colaborar con la Corte Penal Internacional.
Esperemos pues, que efectos tienen la declaración del Fiscal de la Corte Internacional de Justicia, en el gobierno sudanés. Deberían de tener en cuenta que estos conflictos, no hacen más que agravar la crisis humanitaria en la que se encuentran, ya que, la falta de alimentos y los continuos desastres metereológicos, merman demasiado la calidad de vida de sus habitantes. Ojalá algún día, las diferentes etnias que conviven en el territorio, lo puedan hacer de manera harmoniosa, luchando juntos para lograr un desarrollo humano conjunto, que beneficiaría a toda la población.
Fuente: http://www.un.org/spanish/News
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